Juntos ante el dolor
Emily fue trasladada a un hospital particular paraseratendidadesuslesiones.Encuantose recuperó de ellas, fue abordada por miembros de la Procuraduría General de la República, quienes iniciaron uninterrogatorio.Ahí se enteró que Agustín su guardaespaldas seguía con vida y fuera de peligro ya que le informaron que los agentes se habían trasladado al hospital militar para tomarle su declaración.
Emily declaró que solamente recordaba que fue secuestrada por unos individuos, quienes con lujo de violencia la llevaron a un lugar desconocido. Manifestó que fue atada de pies y manos y que en todo momento estuvo con una venda en los ojos que le impedía ver quiénes o cuántas personas estaban en el lugar donde seencontraba.
Declaró también que después de varias horas oyó preguntar a uno de ellos que si no sabían que se trataba de la señora del gobernador. Escuchó a dos de los secuestradores responder que no sabían que se trataba de ella. Acto se
Me jugaste una mala, cabrón, pero así es esto, lo sé. ¡Quiero que me entregues al hijo de la chingada que mató y quemó a mis hijasmañana mismo, hijo de puta! Quiero matarlo con mis propias manos.Ante el comentario, el Panemas se acercó a Mario y preguntó:—¿Qué sucedió,Mario ?—Sucedió que valió madre, Panemas. Han matado a mis hijas por tu culpa y por culpa de este hijo de lachingada.El Torque sacó su arma, la apuntó hacia la cabeza del gobernador, y expresó con coraje:—A mí no me vengas con esas tonterías, cabrón. ¡Aquí mismo te trueno, hijo de la chingada! Nosotros no fuimos los que matamos a tus hijas, si estás con nosotros, mañana mismo te entrego al hijo
—Quiero mi parte mañana mismo en efectivo, Chino, como quedamos, tengo planes que no puedo seguir postergando —dijo Emily al traficante.—No se preocupe señora, yo mismo le llevaré el dinero a donde me diga, si es que todo sale bien. Pero dígame, ¿qué planes tiene?—Eso es algo que a ti no te interesa, Chino. Es un asunto mío solamente.—¿Ya supo dónde están sus hijas? Le aseguro que nosotros no fuimos los causantes de su desaparición.Emily, sin responder, colgó el teléfono celular y luego lo destruyó con un martillo. Tiró los restos del aparato móvil dentro del escusado para después jalar la cadena hasta verlo desaparecer.Crisis internacionalAl día siguiente, cerca de las cuatro de la tarde y despu&eac
No estaba equivocado, al día siguiente de los asesinatos contra los funcionarios, a las 11:32 a.m., al ir circulando rumbo a Tamaulipas para esconderse por un tiempo de sus posibles asesinos, dio la orden a su séquito de seguridad de detenerse en el kilómetro 67 de la autopista Monterrey-Laredo porque la unidad en la que viajaba se estaba calentando por falla mecánica.Un comando armado del cártel Los Nidos esperaba dos kilómetros adelante en cuatro vehículos a que el Panemas y su cuerpo de seguridad pasaran por el lugar para emboscarlos y de esa manera asesinarlos sin darles tiempo de nada.El Torque, al saber que tardarían en reanudar su camino, por el informe que recibió de un “halcón” que seguía de cerca a el Panemas como parte de la operación, ordenó al “halcón” que se retirara del lugar para que no ocasionara sospec