Esta obra nació de mi diario, al que llegué a bautizar como "bitácora del abismo" . He plasmado aquí la mayor parte, en su mayoría una serie de sucesos que por desgracia o por fortuna han tenido lugar en mi vida. No todo es real, no todo es ficción, dejo a la imaginación del lector ese gran dilema: -De pie en la terraza de un sexto piso, apoyando mis manos sobre el barandal observando como cae la tarde en la incansable ciudad, dejando mi mirada perderse en el vasto horizonte. Tal vez sea lo más bonito que he podido tener en meses. La suave y cálida brisa rosando mis brazos descubiertos mientras disfruto este hermoso espectáculo visual llamado “ocaso”. No había imaginado antes que estar aquí disfrutando de mi propia compañía fuese tan placentero, respiro profundo, siento el aire fresco de la tarde llenando mis pulmones, me doy cuenta que he alcanzado muchas de las metas que me había propuesto un par de años atrás. Podría decirse que a pesar de las circunstancias tan adversas, tengo todo lo que un hombre a mi corta edad desearía tener, un amor incondicional, una vida acomodada, un trabajo que me apasiona. Pero recuerdo el motivo que me trajo a este sexto piso y siento como se estruja mi corazón de tristeza. Sé que el amor requiere de sacrificios, pero se vuelve impensable cuando lo que se ha de sacrificar es el mismo amor. << “ Lo contrario del amor es la indiferencia. Mientras me odies significará que aún te importo. Y mientras te importe siempre tendré una razón para luchar por ti y por tu amor”>> No dejaba de repetirme esas palabras en mi mente una y otra vez. La decisión que estaba a punto de tomar era un viaje sin retorno.
View More_Pero… ¿explíqueme como mevan a sacar de toda estatrifulca que se ha desatado enmi contra? –inquirí con ápicede incredulidad en el tono de voz._antes de correr debe aprendera caminar señor Brown, no seapresure, le doy mi palabra quesi nos ayuda y todo resultacomo lo esperamos, yopersonalmente lo ayudaré alibrarse de quienes lo persigueny todo el lío que trae encima,¡ah!, y una cosa más, por si lesirve de consuelo, yo sé queusted no tuvo nada que ver conlos desertores.Sirve de consulo mis bolas, dudabaque realmente supiera de miinocencia o no, todo era unjuego psicológico para ponermede su lado y hacerme confiarsin recelos, deseaba hacer unmill&
_ ¿podría saber con quiénestoy hablando? –Solté mipregunta en busca de unarespuesta que me ayudara adisipar tantas dudas, tal vez fueun poco inoportuna, pero… yala había hecho, muy tarde paraarrepentimientos.“Hay tres cosas que nunca vuelven atrás: la palabra pronunciada, la flecha lanzada y la oportunidad perdida” Proverbio chinoMi anfitrión detuvo la marchay se dio media vuelta paraverme directamente a los ojos,su rostro inmutable no mostrabaseñales de expresión alguna,me escudriñó por un par desegundos como queriendoamedrentarme con ese simple gesto.Pues bien, si amedrentarme queríatendría que hacer mucho másque solo verme a los ojos paraco
_Señor Brown, lo estaba esperando, sígame por favor. –pronunció al verme, un hombre vestido de traje de negocios, luciendo una imponente corbata color rojo escarlata, el color de su cabello casi blanco en su totalidad indicaba el paso de los años, una mirada bastante inquieta
<< ¿Dónde está?, joder… debe estar en esta calle, no veo una mierda aquí, ¿se habrá equivocado Derek?, ajaaaa, con que ahí estás eh…>>Finalmente había llegado a la dirección indicada en la agenda, el lugar resulto ser una cafetería bastante vistosa, “Artisa café”, nada mal, yo con el hambre que tenía no podía _Eh, bueno, creo que es aquí dondedebo deciros adiós mi estimadoamigo, a partir de este momento vaspor tu cuenta, sé que lo lograras ypodrás esclarecer todo este lío en elque te han metido esos gilipollas, ney,yo tengo fe en ti hijo, demuéstrame queno estoy equivocado. -fueron las palabrasde mi colega mientras hacía un ademande despedida con la mano y se disponíaa embarcar en su aeronave._así será Capitán Christopher, así serámi estimado amigo, nunca olvidaré loque haz echo por mí en este día, séque volveré para darte las gracias comoes debido. -respondí mientras me dabavuelta y empezaba a caminar enbúsqueda de una parada de autobús.Nunca me habían gustado lasdespedidas, especialmente cuando lasposibilidades de volver a ver a esapersona eran remotas, me causaba unatristeza queTormenta para 2 - Easifa Capítulo 16. Rupit y Pruit.
_ ¡joder tío! llegas tarde, llevo aquí parado esperándote dos minutos y treinta y siete segundos, ¿dónde diablos te habías metido? Moveos el trasero y ayudadme a empujar las puertas del hangar. –musitaba Chris en medio de una graciosa rabieta._vale, vale, lo dices como si hubie
_verás ney, aquél día en Somalia,llevábamos dos horas volando amuy poca altura, lo que nos indujo aun consumo excesivo de combustible,recuerdo bien que cuando despegamosde la base teníamos autonomía devuelo para 4 horas, nos hacían deescolta dos helicópteros BO-105P conautonomía de vuelo para cinco horascada uno, después de esas dos horasexigiéndole más de lo habitual anuestra aeronave la autonomíase nos redujo drásticamente, pasamosde cuatro horas a solo 3 horas deautonomíade vuelo, hacía solo unpar de minutos habíamos recibidoinstrucciones para regresar a labase, iniciamos un viraje ascendentepronunciado para seguir el rumboque nos llevaría de regreso, y, fueen ese preciso momento mientra
El sitio había sido en definitiva una buena elección, una ostentosa barra construida en fina madera color caoba, luces tenues dando una sensación de relajación inducida muy apropiada para la ocasión. En frente de la barra estaba ubicada una pequeña mesa de madera de dos plazas, me pareció