Share

Capítulo 3

Penulis: Nadia Ríos
La voz, tan dulce y melodiosa, me soltó:

—Gracias, mamá.

¡Cómo! ¿Mamá? ¿De la nada ya soy madre? ¡Esto es de no creerse! ¡Me convertí en madre sin ningún dolor ni complicación de por medio!

En el mundo real, los relatos trágicos de mujeres que morían en el parto me daban mucho miedo. Siempre quise una familia, pero esa idea de ser madre me aterraba.

Justo después de calmar a la chiquita y acostarla para que durmiera, escuché un golpe metálico:

—Jugadores iniciales: 30. Jugadores sobreviviendo: 20.

No lo podía creer. ¡Solo por la simple acción de escoger un apartamento, diez jugadores ya habían perdido la vida!

Saqué el celular, lo acerqué todo lo que pude a mis ojos y, con esfuerzo, logré leer lo que aparecía en la pantalla.

Resulta que todos estaban chismeando información del por qué habían muerto.

Parecía que el matón aquel, el mismo que se veía bien agresivo, y otros tres hombres se habían agarrado a golpes por el tercer piso. Al final, el matón se salió con la suya y se instaló en el apartamento tres.

Cuando apenas abrí la puerta, de allí salió disparada una entidad extraña, con cuerpo humano y cabeza de perro. Abrió la boca como un abismo y, de un solo bocado, se tragó al tipo de un golpe.

Luego, se escuchó un ruido a carne molida, y al terminar, escupió unos cuantos huesos blancos, todavía con trozos de carne pegados.

A través de la puerta semiabierta, los demás jugadores alcanzaron a ver un montón de osamentas. Dieron por hecho que eran restos de jugadores de partidas anteriores.

Al ver eso, la adrenalina de todos los jugadores nuevos se disparó.

Ahora, aparte de Ana y Hugo, todos los demás ya estaban con un nivel de terror de 50...

¡Y eso que apenas era el primer día!

Había un hombre mayor que, al entrar al décimo piso, su nivel de terror subió a 100 y murió al instante. Otros jugadores fueron cayendo de maneras absurdas, ya sea porque los mataron o porque simplemente se murieron del susto.

Claro, todo eso no tenía nada que ver conmigo.

Me levanté, aprovechando que la niña seguía dormida, encontré el trapeador en el baño y me puse a hacer la limpieza de la casa.

El piso rojo quedó tan limpio que casi parecía blanco. ¡Vaya eficiencia la mía!

Las manchas rojizas de las paredes no se quitaban ni a palos, así que no tuve más remedio que tomar una espátula y rasparlas hasta quitarlas.

Cuando terminé, ya era tarde, estaba exhausta y la espalda me mataba. Me dejé caer en el sofá al lado de la pequeña y me quedé frita.

Cuando desperté de golpe, una sensación completamente helada me estaba rodeando.

La casa estaba completamente oscura y frente a mí había una figura borrosa.

Aunque no podía verlo bien, la voz que escuché me heló la sangre.

Con un tono grave y seductor, el hombre soltó una risa:

—Interesante. No me esperaba que hubieras sobrevivido tanto tiempo a manos de Sofía.

En ese mismo instante, la voz fría de Sofía se escuchó con un eco:

—Será mejor que ni la toques. Esta mamá tiene algo... y quiero jugar con ella un rato.

El hombre no respondió. En su lugar, levantó la mano sin más y Sofía salió volando del sofá, estrellándose contra la ventana del balcón con un estruendo y el horrible sonido de huesos quebrándose.

El hombre soltó una carcajada maliciosa:

—¿Quién te dio permiso para hablarme en ese tono? ¿En serio te crees mi hija, mocosa?

No aguanté más y, de un salto, me puse de pie desde el sofá. Mientras tanto, le recriminaba con voz fuerte:

—¿Cómo te atreves a hablarle así a una niña? ¿Dónde se ha visto un padre como tú?

Quería darle una bofetada en la cara, pero por alguna razón, mi mano resbaló y acabé tocándole los abdominales.

¡Madre mía, qué sensación tan peculiar! No pude evitar la tentación de tocarlo un par de veces más.

Al ver que el hombre estaba a punto de explotar de furia, rodeado de un aura oscura y pesada, me apresuré a disimular.
Lanjutkan membaca buku ini secara gratis
Pindai kode untuk mengunduh Aplikasi

Bab terbaru

  • Miope y perdida en el juego del terror   Capítulo 17

    Bruno se descontroló de repente y gritó como un loco:—¿Pero qué diablos? ¡Eso no es más que un corazón humano vivo, y yo también tengo uno!No se atrevía a atacar a otros, así que, aprovechando que Paula estaba distraída, la agarró de golpe y la lanzó contra su propia puerta.Una de las cerraduras de la puerta de Bruno se transformó al instante en una enorme cabeza con las mandíbulas abiertas, que devoró a la chica de un solo bocado, antes de que pudiera siquiera gritar.Ni siquiera quedaron huesos.No tuve ni tiempo para detenerlo.Bruno me miró, completamente fuera de sí, y entendí que también quería lanzarme a mí. Después de todo, le faltaba abrir dos cerraduras.Sofía soltó una risita fría. Su vestido blanco comenzó a hincharse sin parar hasta convertirse en una especie de máquina trituradora, que se cerró de golpe sobre Bruno.En cuestión de segundos, el aire se llenó de trozos rojos flotando a nuestro alrededor. La sangre empapó su vestido hasta convertirlo en un mar escarlata.

  • Miope y perdida en el juego del terror   Capítulo 16

    Los comentarios en el chat estallaron:"¡Vamos a presenciar historia! ¡Es la primera vez que se completa este juego!"Sin embargo, al pensar en irme, me di cuenta de que no estaba tan feliz como imaginaba.A las once de la noche, los cuatro me acompañaron hasta el primer piso.Lo que antes era una muralla impenetrable en la entrada, ahora tenía tres puertas grandes, antiguas y de color negro.Cada una con un número distinto de cerraduras. La mía tenía cuatro, la de la chica delgada una, y la del entrenador dos.Bueno... tal vez ya sabía qué significaba todo eso.Sobre cada puerta, estaba escrito un nombre con el nivel de terror debajo.El mío: "Ivana, nivel de terror: 0."La chica delgada: "Paula, nivel de terror: 99.9."El entrenador: "Bruno, nivel de terror: 90."Los otros dos me miraban sorprendidos, como si no pudieran entender cómo había llegado hasta aquí.¿Qué? Si todos aquí eran tan adorables y amables, ¿qué podría temer?Justo en ese momento, la voz mecánica volvió a sonar, es

  • Miope y perdida en el juego del terror   Capítulo 15

    La vieja, que en vida había sido una madre súper cariñosa, murió en un terrible incendio.Su hijo, que sabía perfectamente cómo usar el extintor y los equipos de emergencia, no pudo hacer absolutamente nada, porque la manguera no tenía ni una gota de agua. Tuvo que ver cómo su madre se quemaba viva, sin poder salvarla.El Boss de la cabeza cortada, por otro lado, era hijo de un miembro de una organización demoniaca. Tenía un excelente desempeño académico, se graduó de una universidad prestigiosa y, con muchísimo esfuerzo, logró escapar de su familia. Pero sus padres, completamente manipulados, creyeron que al comer el cerebro de su propio hijo podrían vivir para siempre.Así que, aprovechando que él estaba desprevenido, lo atacaron con un cuchillo sin filo, le cortaron la cabeza y trataron de sacarle el cerebro.Y aquí estamos, todos reunidos, formando esta extraña y algo torpe familia. Tal vez no sea una coincidencia.De hecho, un día antes del accidente que me costó la vida, había c

  • Miope y perdida en el juego del terror   Capítulo 14

    Sobrevivir hasta el cuarto día no significa necesariamente que tengas que conquistar a los vecinos y conseguir todas las tarjetas de visita.No todos tienen la suerte que tengo yo, de contar con tantos objetos poderosos que me protegen. Y, por supuesto, no todos tienen acceso a los periódicos del piso bajo para influir en los demás psicológicamente.Así que, existe otro camino: La captura y la absorción.A partir del cuarto día, si el jugador A mata al jugador B, el jugador A obtiene la tarjeta de visita de B y, además, heredará todas las tarjetas que B haya conseguido.Es algo así como un juego de caza y control.Si A cuida a B, lo mantiene a salvo hasta que esté lo suficientemente débil, al final A podrá aprovecharse de todo lo que B haya logrado.Y en el fondo, todos nosotros somos los jugadores atrapados que Ana y Hugo están criando.Y, para sorpresa de todos, yo soy la que mejor les ha salido.En las reglas de este juego de terror, el suicidio y las peleas entre jugadores están pe

  • Miope y perdida en el juego del terror   Capítulo 13

    Llegué al piso diez. Ya llevaba varias tarjetas de visita acumuladas en las manos.Desde el piso veinte en adelante, el miedo ya no era tan fuerte, y de hecho, encontré a dos jugadores sobrevivientes.Sin embargo, ninguno se atrevió a desafiarme.Claro, tampoco tuvieron que ayudarme a visitar a los vecinos.Porque los vecinos aquí eran súper amables, ¡incluso abrían la puerta ellos mismos y me entregaban la tarjeta con gusto!Al final, se unieron a mí para visitar a otros vecinos, y así fuimos bajando hasta llegar al piso diez.Los comentarios del chat no tardaron en llegar:"¡Obvio! Con los cuatro grandes Boss del piso treinta vigilando, ¿quién se atrevería a no darle la tarjeta?"Cuando llegamos al piso diez, nos encontramos con un monstruo de dos metros de altura, cuerpo humano y cabeza de perro, parado en medio del pasillo.La puerta estaba completamente abierta, y adentro, había montones de huesos humanos, completamente blancos.El monstruo nos entregó tres tarjetas de visita.Jus

  • Miope y perdida en el juego del terror   Capítulo 12

    —Aquí no hay marcas caras ni falsificaciones, solo vida y muerte. Así que, puedes ponerte lo que se te antoje, salir sin maquillaje si te da la gana, o cargarte todo el maquillaje que quieras. Y si alguna vez llegan aquí después de morir, puedes hacerles lo que te dé la gana.—Claro. Yo de hecho pienso que esa gente, aunque ya esté muerta, no merece una segunda oportunidad de resurgir.Al escuchar lo que yo decía, la chica soltó una sonrisa amplia.Sacó con calma un par de látigos que brillaron en sus manos, y sus ojos se iluminaron con una luz sangrienta.—Está bien. Voy a ser yo misma. Si algún día ellos llegan, morir a mis manos será un honor para ellos.La vi sonreír satisfecha, y no pude evitar sentirme aliviada. Eso sí estaba mucho mejor. ¡Esa sí era la actitud que tenía que tener!***Llegué al piso veintisiete. Allí encontré a una mujer joven, vestida con un uniforme y un maquillaje llamativo, y llevaba un delantal. Sin embargo, algo no cuadraba en su apariencia.En sus manos,

Bab Lainnya
Jelajahi dan baca novel bagus secara gratis
Akses gratis ke berbagai novel bagus di aplikasi GoodNovel. Unduh buku yang kamu suka dan baca di mana saja & kapan saja.
Baca buku gratis di Aplikasi
Pindai kode untuk membaca di Aplikasi
DMCA.com Protection Status