Cuando Broderick llegó al hospital, se sorprendió al ver una urna en un pequeño vaso embotellado sobre la cama del hospital. ¿Quién podría haber reemplazado su cadáver con una urna?"Tráeme al presidente de este hospital", ordenó y Brett inmediatamente se alejó de él e hizo una llamada al presidente del hospital, ordenándole que apareciera donde estaban en ese momento.El presidente de inmediato suspendió lo que estaba haciendo y apareció de inmediato en la sala donde estaban Broderick y otros diez hombres fornidos con traje, que formaban parte de sus guardias."Buenas noches, señor Broderick", saludó cortésmente el doctor. Su mente se inquietó mientras se preguntaba por qué el hombre más poderoso de NorthHill lo habría llamado con urgencia."Se suponía que el cadáver de mi ama estaría aquí envuelto en blanco, pero llegué aquí solo para ver una urna, ¿cómo sucedió eso?" Broderick lo miró fijamente y preguntó de manera poderosa.El presidente tragó saliva y también vio la urna sobre la

"No puedo dejarlo entrar a mi casa, tú eres el que hizo que mi padre me odiara, hombre vil", Amy reprendió al hombre mientras le lanzaba una mirada muy desagradable."Bien, entonces tendrá que confesar aquí", dijo Michael y luego se volvió hacia el gigoló, "di la verdad"."La Sra. Edith me pagó para…" Tragó saliva, una mirada de culpabilidad brillaba en su rostro. Sabía que no se atrevía a ocultar ninguna palabra porque era muy consciente de lo poderoso que era Michael Alessandro. Solo unas pocas personas conocen el poder clandestino secreto que desea Michael Alessandro y él es una de las pocas personas."Me pagaron para secuestrar a tu madre y matarla, luego colocar su cadáver en mi casa y mentir que ella murió debajo de mí durante una sesión de sexo", dijo el gigoló."¿Tú mataste a mi madre?" Amy preguntó en estado de shock. Hasta hoy, pensó que su madre había muerto por accidente."Lo hice", confesó. Sabía que ya había llegado a su callejón sin salida. Estaba listo para aceptar cua

"Sr. Broderick, ¿qué está haciendo aquí?" Amy preguntó con un corazón palpitante, aunque todavía tiene su sombra puesta, no pudo evitar el miedo persistente en su corazón. Se sentía muy expuesta ante él."No estoy aquí por ti, estoy aquí para ver a la mujer que vive aquí", dijo Broderick.Una vez que Michael se alejó del lugar donde se averió su automóvil, Broderick escribió el número de placa del automóvil de Michael y se lo envió a Brett, diciéndole que rastreara el destino final del automóvil. Una vez, Brett le informó que el destino final del automóvil era el antiguo apartamento de Amy. Él mismo condujo hasta allí sin informar a nadie, ya que casi estaba oscureciendo.Amy conocía a la mujer de la que hablaba Broderick. Fue la mujer que Michael envió para ocupar temporalmente este lugar cuando Broderick vino aquí hace unos días."¡Oh! Ella está fuera de la ciudad. ¿Son amigos?" preguntó Amy."Debería preguntarte si eres amigo de ella. O debería decir mejor compañero de cuarto", dij

Broderick se sorprendió al verla cerrarle la puerta. No ha hecho nada malo, pensó para sí mismo. Broderick sabía que ella murmuraba algunas palabras de enojo, pero no podía entender lo que decía.Tal vez, estaba enojada porque apareció temprano esta mañana. Se dio la vuelta y caminó de regreso a donde estaba su auto. Sus dos manos agarraron el volante. Apretó su mano en el volante como si fuera a romperlo, su cabeza reposaba sin poder hacer nada en el reposacabezas de la silla.*Amy regresó a su asiento después de escuchar que el auto de Broderick se alejaba. Caminó hacia su sala de estar y se hundió en el asiento. Sus ojos rara vez se dirigían a la televisión que tenía delante y, de repente, se sentó erguida con tanta seriedad en su rostro y eso fue el resultado de lo que vio.Vio a Broderick Alessandro siendo transportado dentro de una ambulancia, su corazón se hundió en la tristeza porque apretó su puño con fuerza. ¿Qué diablos salió mal con él? ¿No se fue de este lugar hace un pa

Un par de horas más tarde, Amy bajó del Land Rover de Michael que acababa de estacionar frente a su casa. Después de que se fue, Amy comenzó a caminar hacia su apartamento con una bolsa grande en la mano. Una vez que estuvo frente a la puerta, vio una larga sombra y supo de inmediato que alguien estaba cerca, mirando hacia arriba, vio a Broderick aparecer ante ella. Su rostro era frío y demasiado severo. "¡Hola!" Amy saludó. Broderick se quedó mirándola sin comprender, Amy fingió no darse cuenta de su mirada dura y luego abrió la puerta. Empujó la puerta para abrirla, pero luego pensó que sería grosero de su parte entrar y dejarlo afuera. Ella se volvió hacia él y le preguntó: "Señor Broderick, ¿está aquí para verme?". "Necesito que me sigas a alguna parte", dijo con fuerza. "¿Dónde podría ser eso? Acabo de regresar del centro comercial y estoy un poco cansada", dijo Amy. "Cuando lleguemos allí, lo sabrás", dijo Broderick. No sonaba como si estuviera preguntando en absoluto, sonaba co