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Capítulo 98

Penulis: Violeta
—Celia, ¿te divierte enojarme?

César aplicó más fuerza en el agarre, causándole dolor en la muñeca. Pero eso también la hizo reaccionar.

—Señor Herrera, es tan presumido. ¿Enojarte? ¿Para qué me tomaría la molestia?

Él no respondió, solo la observaba con una calma impasible, como si quisiera descifrar cada uno de sus movimientos.

—¡Suéltame! ¡Me duele!

El dolor ya era casi insoportable y los ojos se le enrojecieron por el resentimiento. Instintivamente, César aflojó el agarre ante la expresión de ella. Al liberarse, Celia se frotó la muñeca, enfurecida.

—¿Qué más quieres? ¡Dime!

No lo entendía. Antes la ignoraba por completo. ¿Por qué ahora no podía hacerlo como siempre?

—Ya te dije que no te acerques tanto a Alfredo.

—Yo no me meto en lo tuyo con Sira. ¿Por qué tú tienes el derecho de interferir en mis asuntos?

—No es lo mismo —le dijo con la cara difícil de leer sus verdaderos sentimientos.

Celia apretó los puños hasta que los nudillos se le pusieron blancos, sintiendo un dolor que i
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