Al escuchar su voz gentil, le dolió la nariz. Frunciendo los labios, ella levantó la cabeza y lució una sonrisa que hizo que su hermoso rostro se viera más fea que con lágrimas. "Estoy aquí". "Jefe, Hermana, me llevaré a Anyi a casa primero". Shen Mofei volteó la cabeza para mirar a Lu Shijin. Al saber que ellos iban a hablar sobre las cosas, Tang Ruochu asintió con su cabeza y dijo: "Vayan a casa primero, entonces. Regresaremos pronto también". Shen Mofei tomó a Song Anyi de la mano y la guió al elevador. "¡Mofei!". Tang Ruochu de repente le gritó. Shen Mofei y Song Anyi se detuvieron y se voltearon, solo para escucharla agregar: "Mofei, pase lo que pase, recuerda que todavía nos tienes a nosotros". Mofei abrió lentamente la boca y sonrió tontamente, sus ojos brillaban con un brillo de agradecimiento. Después de eso, él continuó sosteniendo la mano de Song Anyi y avanzó mientras una leve sonrisa finalmente aparecía en su hermoso rostro. Las palabras de su cuñada fueron c

"Si ella es buena o no, puedo verlo por mí mismo. No necesito que me lo digas". El Abuelo Shen ahora estaba un poco enojado. Tang Ruochu no tenía miedo en absoluto. "Abuelo, la gente necesita llevarse bien antes de saber qué tan buena o mala es una persona. ¿Cómo puede saber si ella es buena o mala con tan solo mirar?". "¡Shijin, agárrala y salgan de aquí!". La alegría inicial que tenía el Abuelo Shen al ver a Tang Ruochu desapareció por completo en ese momento. Lu Shijin frunció el ceño ligeramente y defendió a Tang Ruochu. "Abuelo, lo que dijo Chuchu no está mal. Mofei ya no es un niño y tiene derecho a elegir su propia vida. Así que espero que puedas pensar en esto". Mientras hablaba, él se volteó hacia Tang Ruochu y dijo: "Chuchu, regresemos". Tang Ruochu sabía que el anciano era terco y que tal vez no pudiera convencerlo rápidamente. "Abuelo, regresaremos primero, entonces". Tang Ruochu asintió cortésmente al Abuelo Shen, cuyo rostro se había vuelto hosco, antes de sal

"Chuchu...". Ying Xiaoxiao corrió a sus brazos y lloró fuertemente. Ya que ella tenía miedo de angustiar a su madre, quien ya estaba tan preocupada por su padre, ella se había estado reprimiendo. Ahora, ante Chuchu que se preocupaba por ella, ella dejó salir todas sus emociones reprimidas. Tang Ruochu le dio una suave palmada en la espalda y no dijo nada. Simplemente, le hizo compañía en silencio. ... "Parece que ese anciano aún así hizo una movida". Después de que Lu Shijin escuchó el informe de Mu Ling, una expresión seria se materializó en su hermoso rostro. El padre de Xiaoxiao había sido denunciado de repente de forma anónima por soborno y corrupción, pero el caso en sí era extraño. Cuando Chuchu solicitó su ayuda para investigar el asunto, inmediatamente le pidió a Mu Ling que investigara. Con la investigación, él se dio cuenta de que las cosas no eran tan simples como pensaba. "Presidente, ¿qué debo hacer ahora?". Mu Ling también parecía un poco solemne. Él sab

Ella cerró los ojos lentamente y dijo suavemente: "Sí, todo pasará"....La actitud de Shen Mofei era tan firme como siempre, e hizo que el Abuelo Shen se enojara y se quedara perplejo al mismo tiempo. Él pensaba que con su enfermedad, ese mocoso al menos se comprometería con él, pero no lo hizo. Eso lo enfureció y lo inquietó. Esa Song Anyi era mucho más importante para ese mocoso apestoso que él ahora. Xu Wenjing notó que el Abuelo Shen había estado hosco durante los últimos días, y sabía que era por su tercer hermano, por lo que ella tomó la iniciativa de buscar a Shen Mofei. Cuando ella vio a Shen Mofei y Song Anyi salir del edificio de Times, sus ojos se oscurecieron levemente. En el momento en que la vieron, tanto Shen Mofei como Song Anyi se detuvieron simultáneamente. Ella se acercó y preguntó: "Tercer Hermano, ¿es conveniente que hables conmigo?". Shen Mofei se volteó y miró a Song Anyi antes de rechazar su solicitud: "Probablemente sea un inconveniente". Son

Lin Xuezhi sonrió levemente, se llevó la taza de café a los labios y tomó un sorbo. Luego, ella se dio la vuelta para mirar la bulliciosa calle fuera de las ventanas francesas, aparentemente sin prisa por decirle a Tang Ruochu su propósito. Tang Ruochu no la apresuró tampoco y mostró considerable paciencia. Después de un tiempo, Lin Xuezhi giró gradualmente la cabeza y colocó la taza de café sobre la mesa. Ella levantó los párpados y miró el rostro de Tang Ruochu. "Señorita Tang, confío en que has visto la determinación que posee el padre de Shijin. ¿Crees que Shijin puede luchar contra él solo?". "Tengo fe en Shijin". Qué respuesta tan concisa pero ingenua. Lin Xuezhi se rio entre dientes y sacudió la cabeza. "Señorita Tang, ¿no sabes que Shijin no ha hecho ningún progreso en el caso de la familia Ying durante los últimos dos días?". Tang Ruochu frunció el ceño un poco y la miró fríamente sin decir una palabra. La sonrisa en el rostro de Lin Xuezhi se hizo más profunda.