Semua Bab El General Todopoderoso de Dragón: Bab 1521 - Bab 1530

James fue encarcelado en un calabozo oscuro y húmedo. No solo estaba gravemente envenenado, sino que incluso sus puntos de acupuntura habían sido golpeados. Sentía un dolor insoportable que provenía del interior de su cuerpo mientras yacía en el suelo inmóvil. Como era un practicante en el arte de la medicina, sabía que se trataba de un veneno Gu aterrador. El veneno no solo destruiría su cuerpo, sino que los Gu estaban desgarrando su carne de forma lenta y segura. Se retorció en el suelo en agonía. Tumbado en el suelo, sentía que la cabeza le daba vueltas. “No... Tengo que liberar mis puntos de acupuntura y erradicar por la fuerza los Gu del interior de mi cuerpo”. James apretó los dientes y catalizó Energía Verdadera. “¡Argh!”. En cuanto catalizó la Energía Verdadera, los Gu del interior de su cuerpo se vitalizaron y comenzaron a desgarrar su carne. Su rostro se contorsionó de dolor, y no pudo evitar gemir de agonía. Al ver esto, los otros antiguos artistas marciales qu

En el calabozo... Callan y Bennett fueron arrojados descuidadamente al suelo. Sus labios se habían vuelto púrpura, y sus rostros estaban pálidos. Era evidente que estaban envenenados. Al ver cómo capturaron a Bennett, todos sintieron un escalofrío. James, que estaba tendido en el suelo, preguntó: “¿Qué pasó?”. Como su punto de acupuntura estaba golpeado, no podía ver lo que pasaba detrás de él. Jackson, quien estaba apoyado contra la pared, dijo: “Han capturado a dos más. Uno de ellos era Bennett Caden. No conozco al otro”. “Callan, ¿eres tú?”, preguntó James. “Sí…”. Callan habló con gran dificultad: “Caí en la trampa de Lucjan. Supongo que lo subestimé”. James se quedó en silencio. Aunque Callan y Bennett fueran capturados, aún quedaban su abuelo y la líder de la Secta Celestial. Ahora, solo rezaba para que no cayeran en la trampa de Lucjan. “Argh…”. Soltó un quejido de dolor. James intentó liberar sus puntos de acupuntura catalizando Energía Verdadera. Sin emb

En la mazmorra del palacio subterráneo... Sentado en un sillón, Lucjan fumaba su cigarro mientras miraba a James que gemía de dolor. Dijo con indiferencia: “James, mi paciencia es limitada. De ahora en adelante, mataré a un artista marcial aquí cada diez minutos”. Al escuchar esto, la expresión de James se tornó sombría. Fijó su mirada en Lucjan y dijo con frialdad: “Juro que te mataré si alguna vez tengo la oportunidad”. “Qué pena que ese día nunca llegue”. Lucjan sonrió. Nadie podía escapar de la Formación de las Mil Maquinarias. Él chasqueó su dedo. Pronto, un discípulo de la Secta Gu se acercó a él con un reloj. Bajo las órdenes de Lucjan, el reloj se colocó justo delante de James para que pudiera ver el paso del tiempo. Tic tac… Tic tac… Tic tac… El segundero se movió. Lucjan sonrió: “James, la cuenta regresiva ha comenzado. Piensa en lo que dije cuidadosamente. Recuerda, un artista marcial morirá cada diez minutos por tu culpa”. Con una expresión sombría, Ja

Salvar vidas no era el objetivo de Thomas. El destino de los antiguos artistas marciales no le preocupaba. Mientras James estuviera sano y salvo, estaría contento sentado al margen. Su objetivo era el virus bajo el control de Lucjan. No solo eso, tenía un plan sobre el Primer Emperador de Sangre y la Raza Sangrienta. Él tampoco deseaba que Lucjan muriera. La Secta Gu era una secta poderosa e influyente desde hace un siglo. Durante los últimos cien años, la Secta Gu se convirtió lentamente en el gigante que es hoy al reclutar a muchas personas talentosas. Su objetivo era controlar a Lucjan y a toda la Secta Gu. Thomas permaneció en silencio. Mientras tanto, Lucjan se dio la vuelta y se marchó enojado. Estaba molesto porque James había escapado. En ese momento, James estaba escapando hacia el interior del palacio. Él sabía que la única salida estaba protegida por la Formación de Mil Maquinarias, por lo que esta era su única opción disponible. Si quedara atrapado en la Formación d

Thomas les contó algunos secretos que sabía desde hace mucho tiempo. Antes de matar a la Tortuga Espiritual, él había oído hablar de la existencia de dragones. Sin embargo, no sabía si el dragón aún estaba vivo. Había una persona que podía corroborar sus afirmaciones: el Primer Emperador de Sangre de la Raza Sangrienta. Mirando al Primer Emperador de Sangre, preguntó: “¿Tengo razón, Emperador de Sangre?”. El Primer Emperador de Sangre asintió ligeramente con la cabeza. “Sí, tienes razón. Sin embargo, este es uno de los principales secretos de la Raza Sangrienta. Solo el Patriarca sabe de esto. ¿Cómo te las arreglaste para conseguir esta información?”. El Primer Emperador de Sangre miró desconcertado a Thomas, quien estaba disfrazado de Ezekiel. ¿Cómo se enteró Thomas de esta información de alto secreto sobre la Raza Sangrienta? Thomas sonrió al decir: “Desde luego, tengo mis métodos. Además, también conozco algunos secretos sobre los dragones”. Al escuchar esto, Lucjan esta