Semua Bab La heredera que fingía ser esposa común: Bab 11 - Bab 20

El aire estaba impregnado de una fragancia floral suave. María vio la figura bajo el pórtico y claramente pudo sentir su impaciencia.Echó un vistazo al celular en sus manos y de repente entendió, sonrió con amargura.—Abuela, ¡vaya a descansar! Tenemos una cita esta tarde, así que nos vamos. ¡Otro día vendremos a acompañarla!Alejandra les dio varios consejos antes de dejarlos ir. María no le hizo caso a Diego y caminó directamente hacia afuera.Apenas subió al auto, le ordenó directamente al chofer que la llevara al centro comercial del distrito financiero.El chofer miró por el espejo retrovisor al hombre, era el chofer exclusivo de Diego y por un momento no se atrevió a responder.Diego alzó una ceja, volteó hacia la mujer a su lado, notó una pequeña flor prendida bajo la boina que combinaba perfectamente con su ropa, el aire del auto también se impregnó de una fragancia dulce y agradable.Se quedó un poco sorprendido, no esperaba que la aburrida señora Ramírez tuviera este lado ta

María tomó el libro de registro de citas, echó un vistazo a la identidad de los señores y señoras que habían hecho pedidos personalizados, su mirada se detuvo en el último nombre marcado como "por confirmar".Sonrió con ironía y preguntó: —¿Desde cuándo el nombre de Sofía tiene derecho a aparecer aquí?Adriana tosió ligeramente, con expresión incómoda. —Ella... vino acompañada del señor Ramírez, usando la cuota de identidad del señor Ramírez."Alma Étnica" alta costura efectivamente tenía requisitos estrictos en la alta sociedad, pero si Sofía venía con Diego y usaba su estatus para hacer la reserva, la empresa la atendería considerando la posición de Diego como líder de la alta sociedad.Pero si finalmente aceptarían este pedido personalizado, dependía de la confirmación de María.Frente a él, Adriana no había rechazado directamente, solo dijo que eran los procedimientos y reglas de la tienda.En estos años, "Alma Étnica" se había hecho famosa y ya era un símbolo de estatus en la alta

Al subirse al auto, María se recostó sin fuerzas en el respaldo. —¿Cómo es que viniste tú? ¿Dónde está Fernando?—Está vigilando el club. El patrón me pidió que te manejara durante este tiempo.—Primero vamos a MR.—¡Perfecto! —Ana encendió el auto mientras le pasaba una carpeta del asiento del copiloto. —El asistente de Pablo envió una invitación de un programa de televisión, te invitan a participar en un show de variedades.María tomó la carpeta, la abrió y revisó. Era un programa cultural sobre la evolución del arte pictórico moderno nacional e internacional, que invitaba tanto a pintores profesionales como a varias celebridades artísticas de familias tradicionalmente dedicadas a la pintura y caligrafía, en formato de entrevista y variedades.Echó un vistazo a la lista de invitados, además de algunos pintores que conocía, el nombre de Sofía también aparecía prominentemente.Que pudiera participar en un programa con este grupo de pintores de mediana edad, siendo María discípula del m

—Tampoco esperaba que, debido a estas tendencias, las marcas vieran tanto valor comercial en Sofi. Hasta ahora ya hemos recibido seis o siete invitaciones de marcas para ser portavoz, lástima que eliminaron las tendencias...Sofía no esperaba que después de eliminar las tendencias aún pudiera recibir ofertas de marcas, se alegró secretamente, pero en la superficie parecía algo incómoda e interrumpió las quejas de Lina, su voz tenía un toque lastimero pero considerado.—¡Ya basta! Diego ya está casado, aparecer en tendencias no es algo bueno para él, ya ha hecho demasiado por mí, ¡no puedo ser tan inmadura! Además, si María viera las tendencias, quién sabe si volvería a pelear con Diego...Lina había actuado como la mala, así que Sofía naturalmente también tenía que actuar como la buena, de paso mencionó a María para sembrar dudas sobre ella en Diego, mostrándose como un primer amor comprensiva y considerada.Lina a un lado tuvo que admitir que, para manejar hombres, Sofía definitivamen

Después de tantos años afuera acostumbrada a depender solo de sí misma, al regresar con los Rodríguez y tener familia en la que apoyarse y confiar, gradualmente había llenado ese vacío de su infancia.—Ya que regresas a trabajar, en estos días te paso todo el trabajo y yo me voy a trabajar a la empresa de enfrente.Aunque igual tendría que ir y venir entre las dos empresas, ahora era diferente. Venir a MR ya no sería trabajar, ¡sino ver a su hermana!Pensando en que Javier había dejado su propia empresa de entretenimiento para venir a manejar MR por ella, María se sintió culpable y le jaló la manga del saco con sinceridad. —Gracias, has trabajado mucho. Este año para las fiestas te diseño un traje extra para que seas la estrella más brillante en la alfombra roja.Había sido difícil para Javier manejar dos empresas solo para complacer sus caprichos. En ese momento sonó el celular en su bolsillo, contestó la llamada y al escuchar que Carlos había despertado, se levantó de inmediato.—¡Vo