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Durante mucho tiempo, Inés del Valle creyó que Emiliano Cornejo era su única luz en este mundo. Hasta que, mirándola directamente a los ojos, él le dijo con cruel indiferencia: —Mi compromiso con Mariana Altamirano no se cancelará. Si quieres, puedes seguir siendo mi amante. En ese instante, Inés despertó. Esa luz que tanto amaba, hacía mucho se había convertido en la sombra que la asfixiaba. Esa misma noche, se marchó de la casa sin volver la vista atrás. Todos pensaron que una huérfana como ella, sin el respaldo de los Cornejo, no tardaría en arrastrarse de vuelta, rogando por perdón. Pero entonces ocurrió lo inesperado. En plena ceremonia de compromiso entre los Cornejo y los Altamirano, Inés apareció vestida de rojo, del brazo del patriarca de los Altamirano, Sebastián Altamirano. Ya no era la mujer abandonada: ahora era la cuñada del novio. El salón entero quedó en shock. Emiliano, furioso, pensó que todo era una provocación. Dio un paso hacia ella… Y entonces una voz helada, firme como el acero, se dejó oír por encima de todos: —Atrévete a dar un paso más… y verás lo que pasa.

Al renacer en esta segunda vida, tomé una decisión: mantendría la máxima distancia posible de Santiago Fernández. Cuando lo vi llegar como director a mi empresa, renuncié esa misma tarde. Cuando compró un apartamento en mi edificio, me mudé al otro extremo de la ciudad. Y cuando anunció que dirigiría el imperio familiar desde aquí, solicité mi traslado internacional. En mi vida anterior, lo había obligado a casarse conmigo usando mi embarazo como chantaje. Pero justo el día de la boda, su primer amor regresó. Al vernos juntos en el altar, corrió hacia la terraza y saltó al vacío. Santiago fingió que nada había pasado y se casó conmigo, sonriendo. El día de nuestro aniversario de bodas, nos llevó a mi hija y a mí a hacer puénting. Pero él cortó las cuerdas, y mi hija y yo caímos, muriendo destrozadas. Después de nuestra muerte, se inclinó sobre nuestros cuerpos y rio con crueldad: —¡Si no fuera por ti, Valentina no se habría suicidado! ¡Ahora ve y págale por tu culpa! Cuando volví a abrir los ojos, había regresado a esa noche en que usé mi embarazo para obligarlo a casarse.

Después de renacer, tomé la firme decisión de dejar de obsesionarme con mi amigo de la infancia, Federico Torres. En su fiesta de cumpleaños colgó un cartel que decía: «Prohibido perros y Clementina». Sin titubear, me largué a Hawái y puse océanos de por medio. Cuando comentó que el simple olor de mi perfume le revolvía el estómago, obedecí y me mudé sin chistar. Al graduarnos anunció que no pensaba respirar el mismo aire que yo en ninguna ciudad; hice mis maletas —rápido— y desaparecí para siempre. Por último, aseguró que mi mera existencia podía malinterpretarse ante su amor imposible. Asentí y, muy pronto, presenté en redes a otro chico como mi novio. Una y otra vez elegí lo contrario a lo que hice en mi vida pasada. Porque, en aquella otra vida, cuando por fin me casé con él, su amor ideal se arrojó desde un acantilado. Él me llamó asesina, me torturó, me quebró… y acabé devorada por los peces. Esta vez, lo único que quiero es vivir de verdad. Así que tomé de la mano a mi nuevo novio. Pero Federico se plantó en medio de la calle, con los ojos encendidos de rabia. —Clementina, ven conmigo ahora y olvidaré esta broma.

Mi hermana, María Sánchez, que siempre despreciaba la escuela, de pronto quiso presentar el examen para la universidad y les pidió a mis papás que me casaran con el hijo de un alto mando militar; a cambio, el general pondría el dinero para su carrera, un “apoyo” disfrazado de arreglo. Entonces supe que ella también había renacido. En la vida pasada, a María los libros le daban flojera: salió de la prepa y se casó con el hijo del comandante de zona, con un arreglo generoso de por medio. Luego a Bruno lo cambiaron a la frontera norte, a una Zona Militar pegada a nogales; a ella le repugnó el entorno y se negó a irse con la tropa. Yo, en cambio, terminé la universidad a puro trabajo y ahorro, entré a una dependencia pública con plaza base y me volví, por fin, capitalina de verdad. Ya metida en la vida castrense, María empezó a cobrar mordidas usando el nombre del suegro general. Lo metió en broncas con los de arriba; la Contraloría de la Militar lo bajó de puesto sin miramientos y, al final, la suegra la corrió de la casa. Tras el divorcio, la engancharon con una “asesoría” para invertir en la Bolsa de Valores; vino el desplome y quemó los ahorros de jubilación de mis papás. Sin salida, se me pegó y, cuchillo en mano, me obligó a entregarle mis ahorros y mi casa “para levantarse otra vez”. En el jaloneo me dio doce puñaladas. Me desangré. Cuando abrí los ojos otra vez, estaba de vuelta al principio: mi hermana les pedía a mis papás que me casaran con Bruno. Yo acepté encantada y me di de baja de la prepa de inmediato.

“You're just a contract wife!” Harry Anderson's words cut deep. Trapped in a loveless marriage to save her family, Arabella fights for warmth from a scarred CEO who despises her. Can love bloom in a prison of pain?

"I had just one wish. To live happily ever after with my husband and I could see that, but I guess, fate has other plans". Lucia could never expect such great betrayal from her husband, Harry, after a wonderful holiday. Not only was she served a divorce paper, but she also caught him in his office with her manager's daughter. Sacked from work and forced to watch Harry proposing to another woman, Lucia swore revenge and there was only one way to get it. By accepting his boss's offer, who seemed to know her more than she thought, or was everything just a coincidence? What happens when her ex-husband crawls back on his knees towards her?

My father owned a very rich and powerful man a huge amount of money and since he couldn't pay back,I was given to him as a price to pay for his debt. I became his possession, his slave,his sex slave,his puppet and most obedient of dogs. His name was Harry Corner. He is a man everyone fears, his name itself will make a hundred of people bow, he was a ruthless billionaire prince with a worst childhood. He is a sacarred idol. Harry was my pain. My sufferings. He abused and defiled me in the most horrible and cruel ways. He brought me pain, He owned my soul He owned my body He owned every piece of my body; to do with it whatever he likes.

Harry at long last quit singing when he saw the lady remaining before him, and the band additionally quit playing. He thought it was only one of his admirers or fans. He took a gander at the smashed lady who lacked the ability to stand up still. She was wearing a free dark shirt and pants, her hair was long, white skin and with a basic wonder. She even ventured nearer to him prior to talking. "Hello you! I know you, that such face misleading ladies!" said Arosh uproariously. "What? “Harry asked in shock. "You attractive men continuously carry bogus desire to ladies, then when they experience passionate feelings for you, you will leave! You are so terrible! You are bold!" Arosh yelled irately. "Come on Arosh" Fanky yelled, as she attempted to hold Arosh by the arm, yet Arosh went wild. "No, I will seek retribution on this moron!"

Mia Williams thought landing a job at Declan Enterprises would finally bring stability—until she met the man who runs it. Harry Declan is a billionaire CEO with a reputation for being ruthless, brilliant, and entirely untouchable. But when Mia accidentally stumbles upon a confidential document that could unravel a major acquisition, Harry doesn’t fire her. He makes her an offer: stay quiet, follow his rules—and in return, he’ll give her everything she’s secretly craved. Control. Power. Him. As their dynamic spirals from professional to possessive, Mia finds herself falling under the spell of a man who plays dirty in business and even dirtier in the bedroom. But with secrets lurking in every shadow of his empire, Mia has to decide: is she a pawn in his game… or the only one who can beat him at it?

Diselingkuhi kekasihnya dengan wanita kaya, membuat Eleanor Wilson harus bekerja keras. Harry Walker meninggalkan Eleanor setelah menjadikan sertifikat rumah miliknya sebagai agunan hutang pada teman lintah daratnya. Setelah putus, Harry Walker sama sekali tak ingin terusik dengan hutang tersebut, sehingga Eleanor terpaksa mencari pekerjaan paruh waktu di sela waktu luangnya setelah bekerja di kantor untuk membayar cicilan hutang. Dalam situasi terjepit dikejar renternir, Eleanor akhirnya bertemu dengan seorang pria kaya. Aaron Fletcher, CEO muda yang sangat membutuhkan bantuan Eleanor. Dia bersedia membayar semua hutangnya, dengan asalkan Eleanor mau menikah kontrak dengannya. Bagaimana kisah mereka selanjutnya? Baca selengkapnya di novel 'Suamiku Billionaire' di aplikasi GoodNovel. Jangan lupa follow akun IG @ummu.nadin