—Está bien —expresó Zhong Keke mientras se dirigía hacia el vestuario. Con la ayuda del personal, se cambió a la bata, que le sentaba perfectamente, realzando su elegancia y estilo. Mientras la maquilladora se aplicaba el maquillaje, Zhong Keke entabló una conversación y descubrió que tanto el vestido como las joyas fueron diseñados por un famoso creador extranjero. Además, este conjunto era único, lo que cosechó muchos elogios durante el desfile de moda y despertó el interés de numerosos compradores. Parece que el joven maestro Gu lo compró y se lo dio como regalo, mostrando su preocupación por ella, comentó la maquilladora con cierta adulación. Zhong Keke respondió con una sonrisa cortés. La relación entre ella y Gu Lichen no era exactamente lo que creían los demás. Sin embargo, tuvo que admitir que, aunque Gu Lichen no la amaba, le había mostrado suficiente aprecio al tratarla como su novia. Al menos, para los demás, parecía que la adoraba. Terminando con el maquillaje y

—Me encanta. Es absolutamente impresionante —expresó Zhong Keke con deleite. —Déjame ayudarte con las joyas —se ofreció, tomando el collar de zafiros y ayudándola a ponérselo. El exquisito y opulento collar añadía un aire de refinamiento al adornar su delicado cuello. —¿Por qué no te disculpas? —La voz de Gu Lichen resonó nuevamente, pero esta vez dirigida a Song Qingyao y los demás. Intercambiaron miradas y Song Qingyao pareció desconcertado. —Tú... ¿Quieres que me disculpe? —¿No es eso apropiado? Como sabes que Keke es mi novia, debes tener en cuenta tus palabras y acciones —el tono indiferente de Gu Lichen tenía un toque de peligro. Cuando Gu Lichen se inclinó para recoger los aretes de zafiro, ayudó gentilmente a Zhong Keke a ponérselos, lo que presenta un marcado contraste con su comportamiento hacia Song Qingyao hace unos momentos. Song Qingyao apretó los dientes. Ella lo había admirado desde la infancia, pero él nunca la había considerado como su novia. Todas su

Probablemente lo consideró una mentira inofensiva, destinada a protegerla. —Gracias —dijo ella, retirando suavemente su mano de la de él. Una extraña sensación de vacío se apoderó de él mientras miraba su mano ahora vacía. El coche se detuvo a la entrada de la gala benéfica. Cuando Zhong Keke y Gu Lichen salieron del auto, las luces intermitentes de las cámaras los rodearon. Zhong Keke trató de evitar las cámaras. —No te preocupes —la voz tranquilizadora de Gu Lichen resonó en sus oídos. —Estas son solo tomas de rutina. Tenga la seguridad de que sus fotos no se publicarán en línea. Se sintió consolada, sabiendo que él podía hacer que eso sucediera. —No tienes que mirar a las cámaras. Si no sabes dónde mirar, solo concéntrate en mí —continuó su voz para tranquilizarla. Empezó a sentirse más a gusto. —Está bien... entiendo —respondió Zhong Keke, mirando a Gu Lichen a su lado. Su estado de ánimo tenso pareció aliviarse también. Sosteniendo el brazo de Gu Lichen, Zhong Ke

—¿Zhuo Qianyun y Ye Wenming? —Gu Lichen siguió la mirada de Zhong Keke y preguntó: —¿Quieres saludarlos? —Sí, pero esperemos a que los reporteros se vayan primero —sugirió Zhong Keke. Después de un tiempo, los reporteros parecían haber terminado sus entrevistas y se alejaron de Zhuo Qianyun y Ye Wenming. Zhong Keke y Gu Lichen se acercaron a ellos. —Hola, hermana Zhuo —saludó calurosamente Zhong Keke. Zhuo Qianyun pareció un poco sorprendido de ver a Zhong Keke. —Keke, tú también estás aquí. —Sí —confirmó Zhong Keke. Zhuo Qianyun también saludó a Gu Lichen y le dijo a Zhong Keke: —Este es mi esposo, Ye Wenming—. Se volvió hacia Ye Wenming y agregó: —Wenming, esta es la novia del Sr. Gu, Zhong Keke. —Hola, señor Ye —Zhong Keke le tendió la mano. —Hola —Ye Wenming le estrechó la mano cortésmente y observó a Gu Lichen y Zhong Keke. Después de intercambiar cortesías, Zhong Keke se volvió hacia Zhuo Qianyun y le dijo: —Hermana Zhuo, ¿le importaría hablar conmigo u

Zhong Keke no estaba segura. Aunque había gemas con Gu Lichen, no estaban a su disposición. Además, ella no trajo nada más hoy. Sintió un momento de nerviosismo. Al notar la vacilación de Zhong Keke, el anfitrión bromeó: —¿La encantadora dama tiene problemas para decidir qué donar? Cualquier cosa pequeña servirá... Zhong Keke permaneció en silencio y, mientras el silencio persistía, las voces de la multitud comenzaron a sonar. —¿Está tratando de evitar la donación? —Algunas personas se visten bien, pero carecen de generosidad. —Si es tan tacaña, ¿por qué asistir a una gala benéfica como esa? Mientras tanto, Song Qingyao, no muy lejos, se burló de la extrañeza de Zhong Keke. Aunque este segmento era una parte regular de la gala, iluminaron a propósito a Keke, tratando de exponerla como la extraña entre los glamorosos asistentes. Zhuo Qianyun trató de ayudar a Zhong Keke cuando de repente habló claramente: —Me gustaría donar un retrato. Solo necesito que alguien sea m