All Chapters of Siempre Estado Tú : Chapter 41 - Chapter 50

DanteMe quedé sin palabras y congelado en un lugar mientras estaba allí, incapaz de contener la ira que estaba construyendo dentro de mí. "¿Qué dijiste exactamente?" La observé mientras giraba y, con un jadeo, dejó caer su teléfono al suelo."Dante.""¿Qué acabas de decir, madre?" Comenzó a morderse las uñas, y luego se agarró el vestido como si su vida dependiera de ello. Ella estaba luchando por algún equilibrio mientras temblaba hacia atrás."¿Qué está pasando aquí?" Mi padre entró en la habitación. Sus ojos se movieron de mi temblorosa madre a la mía. "¿Te importa explicar lo que está sucediendo aquí?" Esperé a que mi madre abriera la boca y explicara por qué había hecho lo que había hecho."Puedo explicarlo." Me burlé de lo que había dicho."¿Puedes explicarlo? Escucha, no quiero verte nunca más, y nunca volverás a ver a tus nietos. ¿Lo entiendes?""Dante, por favor permíteme explicarte. ¡Eres el culpable de todo!" Gritó."¿Y merezco ser mantenido en la oscuridad? ¡Soy su padre!

~Lola~No debería estar aquí. Debería estar en Nueva York, explicándome o luchando por mis hijos. No me siento bien con esta caminata, pero estoy aquí. Dos tipos se nos unieron, y ahora sé que Logan es el alto, que tiene casi la misma altura que Mason, y Matteo es el que tiene un pie más bajo que ellos. Todos los demás fueron un poco más rápidos que yo. Mi cuerpo estaba con ellos, pero mis pensamientos estaban en Nueva York, con mis hijos. Mason se detuvo y sonrió hacia mí antes de tomar mi mano en la suya y entrelazar nuestros dedos mientras seguíamos el camino desgastado a través de los pinos altos. Por un tiempo, entramos tranquilamente. El único sonido era nuestros pies crujiendo a través de los troncos y las hojas siendo arrojados a través de la pasarela, puntuados por el graznido de un cuervo por encima. Mason se detuvo y me miró de nuevo."¿Te pasa algo malo?" Quería contarle todo, pero no me atreví a abrir la boca y decir: "Vine aquí porque este podría ser nuestro último día j

Dante Me senté a la mesa con mis tres hijos y su abuela para cenar. Es un alivio que los niños aún no hayan empezado a preguntar por su madre. No quiero que ninguna mujer entre a mi casa y críe a mis hijos. Su madre ha hecho un trabajo excepcional criándolos. Si ella puede hacerlo sola sin ayuda, yo también puedo hacerlo. Observé cómo la madre de Lola me miraba. No ha dicho una palabra. "¿Cómo estuvo tu viaje, madre?" "No está mal. No podía dejarte salir del país desde que me dijiste que tenías hijos. Sin embargo, ¿quién es su madre?" Así que es cierto que ninguno de ellos se parece a Lola. Pensé que mi ángel se parecía a su madre. "Conoce a Kai, Tyler y Mia, Madre. Tus nietos." Ella no empujó la conversación; seguimos comiendo hasta que Mia habló. "Papi, no me gusta esto. No sabe bien." Ella comentó sobre esto mientras elegía los guisantes. La realización amanece en la madre de Lola mientras mira a Mia y cómo estaba seleccionando los guisantes. A Lola tampoco le gustan los guisan

El punto de vista de LolaEste es el mayor error que he cometido en mi vida. Uno de ellos, al menos. Han pasado cuatro años y ocho meses desde que me fui de casa. He olvidado por completo cómo es. Pero aquí estoy, en el centro del aeropuerto regional de Ozark, esperando mi vuelo de regreso a Nueva York. Estoy rodeado de individuos que están entusiasmados con un viaje a quién sabe dónde, pero todo lo que veo es temor. Descuidé a mis hijos y me fui de excursión con Mason y June. Eso podría haber sido planeado para todo lo que sé. June hizo un maravilloso trabajo enviando esas fotos a mi marido, Dante. Tuve un momento con Mason. No me arrepiento, pero al mismo tiempo, no puedo entrar en una relación con él mientras tenga problemas sin resolver con Dante. Dante no estaba destinado a averiguar sobre Mason y yo de esta manera. No es que esté saliendo con él ni nada, pero sigo siendo la esposa de Dante, y ahora le he dado otra razón para llevarse a mis hijos. No estoy seguro de si me gusta M

El punto de vista de LolaEsperaba que Dante respondiera a mi arrebato, pero no lo hizo. Me miró sin palabras, al menos lo supuse. Pero una cosa estaba clara: estaba furioso. Después de haber salido de mi habitación tan repentina y silenciosamente, corrí a cerrarla de golpe y me agarré contra ella como lo hice. Me agarré con fuerza el pecho. ¿Qué ha sido eso?No entiendo por qué mi corazón late tan rápido. ¿Qué es esta extraña sensación que se extiende por mi pecho? Espera, ¿todavía siento algo por Dante? Naa, quiere llevarse a mis hijos. No puedo seguir preocupándome por él, ¿verdad? Pero si ese es el caso, ¿entonces por qué me estoy sofocando de adentro hacia afuera? Es como si un fuego se iniciara a mi alrededor, lo que me está haciendo extremadamente caliente y causando que salga mucho sudor de mis poros. ¿Por qué estoy pensando en esto? No es que hayamos lidiado con todo esto antes; huimos de cómo nos sentíamos. Mis sentimientos por él no desaparecerían. Al final del día, sigue s