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Capítulo 11

Author: Pececillo Jinete
Como el hermano mayor entre los jóvenes de la familia García, Martín siempre llevaba una sonrisa en el rostro, pero lo cierto es que casi nadie se atrevía a desobedecerlo.

A veces, incluso resultaba más convincente que los propios padres.

Tal como sucedía ahora con Samuel, que al recibir la advertencia en la mirada de Martín, cerró la boca de inmediato y dejó de hablar.

Lucía miró a Martín, bajó los ojos en silencio y dejó que su expresión quedara oculta.

Doña López fue llevada por los guardias de seguridad de la residencia para mantenerla vigilada, pero el asunto no era fácil de resolver.

A simple vista, Doña López no había robado ningún objeto de la familia García, así que llamar a la policía estaba descartado, a lo mucho se podía decir que estaba metida en supersticiones raras, después de todo, aquello de robar la fortuna de una familia no tenía un sustento real.

Pero luego de lo ocurrido, estaba claro que Doña López no podía seguir en casa de los García.

—Señorita, ¿qué hacemos con
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