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Capítulo 7

Author: Zafira
Después de aquel día.

Los padres de Federico me llamaron una y otra vez. Me preguntaron si quería volver.

Me negué de plano.

Salí de ese lugar con mucho esfuerzo; ¿cómo pretenden que regrese?

El día que quedé a comer con Rodrigo.

Seguía cubierto de pies a cabeza.

Lo entiendo: su rostro llama demasiado la atención.

Reservé un salón privado.

Pero el destino es cruel: me topé de nuevo con el patán de Federico.

Se lanzó y me sujetó la mano.

—¡Clementina, ¿de verdad me traicionaste?

—Creí que bromeabas, ¡y resulta que sales a comer con este tipo!

—¿Quién es él?

—¿Me estás haciendo un teatro, Federico?

Rodé los ojos y le pellizqué con saña el antebrazo.

Cuando me soltó, protegí a Rodrigo y retrocedí.

Federico sufre un “síndrome del supermacho”; se enloquece a la mínima.

Ya antes había estampado mis maletas sin motivo y las dejó inservibles.

Sus ojos se llenaron de dolor.

—¡Clementina, lo defiendes a él!

—¿Y quieres que defienda a un patán como tú? —respondí harta—. Vete ya. Cada dos por tres
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