All Chapters of Términos de Rendición: Chapter 341 - Chapter 350

Damián curvó ligeramente los labios, sus ojos mostraron destellos astutos.Valeria se sentía como en brasas. Rodrigo se volteó para jalar a Damián: —Señor Figueroa, vamos primero nosotros, ella es una chica y le da pena.Solo entonces Valeria miró a Rodrigo con gratitud. Desde que vio a Rodrigo hoy, sintió que por fin había dicho algo sensato.Damián se levantó y se fue. Valeria suspiró de alivio en silencio.Cuando tomó su bolso para irse, recibió un mensaje en su teléfono.Patrón: "Atrévete a irte y verás."Valeria se sintió sin palabras. Se frotó ligeramente la frente, lo pensó y aún así escribió un mensaje."Señor Figueroa, no es lo que usted piensa."Mientras más en estas situaciones estaba, más humilde se volvía la actitud de Valeria, porque sabía que con sus dos estrategias no podía ganarle a Damián."Hoy solo quedé con Rodrigo para hablar de asuntos del trabajo, no quería que malinterpretara por eso dije eso."Después de enviar el mensaje, Damián no respondió por mucho tiempo.

Valeria se sintió tan avergonzada que inmediatamente trató de sumergirse en el agua.Los ojos del hombre se llenaron de burla, de repente soltó la mano, Valeria perdió el apoyo y solo pudo deslizarse hacia el agua. Viendo que todo su cuerpo estaba a punto de sumergirse, rápidamente rodeó la cintura de Damián con los brazos.Usando manos y pies se aferró al cuerpo de Damián. Esa posición se veía... un poco vergonzosa.Su corazón aún no había tenido tiempo de calmarse cuando Valeria escuchó la risa burlona de Damián desde arriba.—Tsk, esto fue iniciativa tuya, no tiene nada que ver conmigo.—¿Ah? —Valeria bajó la vista y finalmente se dio cuenta de su situación. Su cuerpo blanco como la nieve estaba pegado firmemente al cuerpo de Damián, no había ni una pizca de espacio entre los dos.Incluso podía sentir claramente que su vientre estaba presionado contra la parte íntima del hombre, que incluso mostraba signos de cambio.La vergüenza inmediatamente se apoderó de su rostro. Trató de solt

El amor en esos ojos estaba a punto de desbordarse. Si no fuera por estar en un lugar público, Valeria sentía que esta chica podría lanzarse directamente a los brazos de Damián.Mientras que Damián tenía una actitud despreocupada. No sabía si era porque había gastado energía en la tarde y estaba cansado, sus ojos perezosamente observaban a la chica frente a él. De vez en cuando se reía ligeramente y asentía.Valeria sintió que se le cerraban los puños. Este tipo Damián realmente no tenía vergüenza, acababa de acostarse con ella y ya estaba en una cita con otra.¡Cita y ya, pero encima quería que ella fuera su chofer! ¡Y un chofer con hambre!En este momento, Valeria sintió cierta opresión en el pecho. Se mordió ligeramente el labio, simplemente decidió no mirar más y fijó la vista en la computadora. Pero no podía concentrarse en el trabajo.Veinte minutos después, resignadamente cerró la computadora, y al final no pudo resistir levantar la vista hacia Damián en la vitrina.En solo vein

Valeria se sintió frustrada. Sus palabras habían sido tan normales, ¿cómo era que en boca de Damián se volvían...Se volvían tan provocativas y sugerentes?Apretó ligeramente los dientes.En ese aspecto no tenía ninguna posibilidad de ganarle a Damián.Mejor cerró la boca y se concentró en ser solo su conductora, sin querer volver a abrir la boca para nada.Damián parecía no importarle, no sabía si estaba cansado, pero se recostó en el asiento y cerró los ojos fingiendo dormir.Valeria estacionó el auto y volteó a recordarle:—Señor Figueroa, llegamos.Damián abrió lentamente los ojos y bajó del auto.Ni siquiera un "gracias".Viendo la figura de Damián desaparecer de su vista, encendió el auto y se fue.No quería quedarse ni un segundo más en ese lugar.Originalmente había pensado regresar a casa de los Rivas, pero recordando todo el desorden de estos días.Lo pensó mejor y regresó a su propio departamento.Para no tener que escuchar las tonterías de Arturo.Justo estaba pensando cuan

—Sabes perfectamente bien que es imposible con Sofía y aun así tienes que coquetearle, ¿no es como empujarla hacia un pozo de fuego?—Al estar molestando tanto a Sofía, ¿crees que Irina la va a perdonar si se entera, o que los Ibáñez la van a perdonar?Aunque las palabras de Valeria sonaban duras, cada frase era pura verdad.El rostro de Marcos palideció un poco, y dijo en voz baja: —Encontraré la manera de cancelar el compromiso con Irina.El rostro de Sofía mostró cierta emoción.Pero Valeria no se lo creyó: —Entonces por favor busca a Sofía cuando ya estés soltero.Marcos apretó un poco los dientes.Miró una vez más a Sofía: —Entonces me voy.Sofía se mantuvo indiferente y apartó la mirada.En la habitación solo quedaron Sofía y Valeria.Cuando sus miradas se encontraron, Sofía esquivó un poco la vista.Valeria suspiró levemente.El aire se quedó en silencio por un momento, luego Valeria caminó hacia la cama de Sofía y la miró.—Sofía, muchachos como Marcos, esos niños ricos, al fin