Todos los capítulos de Términos de Rendición: Capítulo 561 - Capítulo 570

"Regular" y se lo comió todo.Se quejó mentalmente sin parar, pero no lo demostró en su rostro. Bajó la cabeza y comenzó a disfrutar de su cena.Cuando terminó de comer y alzó la vista, se dio cuenta de que Damián seguía sentado en el mismo lugar sin haberse ido.Además la estaba mirando con una expresión particularmente extraña.Se llevó la mano a la cara y preguntó:—¿Qué pasa? ¿Tengo algo en la cara?Damián apretó ligeramente los dientes posteriores, con aspecto de no estar muy contento.—Ya me enteré de lo del Grupo Rivas.Valeria pensó que quería consolarla, así que sonrió y agitó la mano:—Oh, no pasa nada. Es solo opinión pública. Cuando pase este tiempo todo estará bien, la gente siempre olvida.Sonrió, como si realmente no le importara nada.Damián se burló:—Qué optimista te ves.Valeria asintió:—Por supuesto.Después de decir eso, se terminó el último bocado de fideos, se levantó, recogió el plato y lo llevó a la cocina.Las empleadas se encargarían de lavar los platos.No

Valeria instintivamente pensó en esa noche en 'El Paraíso'.En lo que Damián le había dicho a Mónica.Esto era la promoción que Damián estaba haciendo para el regreso de Mónica.También era el método que Damián había usado para ayudarla a suprimir las noticias trending.No había dicho nada, pero ¿ya había hecho tantas cosas en secreto?Valeria no pudo evitar sentir una calidez recorriendo su corazón.Jimena, sentada frente a ella, la vio cambiar de expresión repetidamente mientras sorbía su bubble tea con el popote.—¿Qué pasa?Valeria volvió en sí y negó con la cabeza hacia Jimena:—Nada, no es nada.Jimena se daba cuenta de que tenía algo en mente.Pensando que aún estaba preocupada por lo de las noticias, después de pensarlo simplemente dijo:—Valeria, aunque no nos conocemos bien, quiero decirte algo.—Damián es un buen hombre.Valeria exclamó y alzó la vista hacia Jimena:—¿Por qué de repente dices eso?—Que hablo demasiado —Jimena se rió—. Se acercó más a ella:—¿No crees que Dam

Valeria apretó los labios.No quería tener un enfrentamiento directo con Simona.Simona ya tenía una gran opinión negativa sobre ella.Si llegaran a pelear, al final los que quedarían en una posición difícil serían los Prado y los Castillo.Asintió ligeramente a modo de saludo.—Tengo algo que hacer, me voy.Sin esperar a que Simona y Mariana dijeran algo más, se dio vuelta y se fue directamente.Aunque su rostro se veía tranquilo, sus manos fuertemente apretadas a los costados delataban su estado de ánimo.En cuanto entró al camerino, Jimena le hizo señas.—Vale, ven acá.Valeria se acercó y preguntó:—¿Qué pasa?Jimena se acercó a su oído y preguntó:—¿Puedes contactar a Damián?Valeria se detuvo y preguntó:—¿Por qué?Jimena la miró y luego negó con la cabeza:—No es nada, veré si puedo contactarlo de otra manera.Valeria asintió ligeramente.***En el hospital.Damián estaba sentado junto a la cama de Lila, con expresión algo sombría.El doctor a su lado dijo en voz baja:—Señor Fi

Valeria no había terminado de hablar cuando un hombre alto apareció frente a los dos.Por la forma en que se dirigía a él, debía ser alguien de los Figueroa.Damián asintió indiferentemente y bajó la cabeza para mirar a Valeria.Luego se fue con el hombre.Cuando Damián llegó al cuarto de al lado, solo estaba Simona.Estaba sentada en el sofá con expresión algo sombría. Al ver entrar a Damián, frunció el ceño fuertemente.—¿Algo que necesites?Damián dijo con voz grave:—Si no hay nada, tengo otros asuntos que atender.—Ja, ja —Simona se rió fríamente por la irritación que le causaba Damián.—¿Tienes asuntos? ¿Andas ocupado defendiendo a tu zorra, verdad?Simona golpeó fuertemente la mesa y miró a su hijo que estaba parado no muy lejos.Siempre había estado orgullosa de Damián.Todos estos años había luchado entre tantos descendientes de los Figueroa para controlar todo el Corporativo Althea.Pero recientemente el asunto de Damián con Valeria la tenía algo molesta.Se quedó en silencio

Después de que murió su madre, Elena, aunque era una empleada contratada por la familia, muchas veces se preocupaba más por ella que el propio Arturo.Pero los mayores, en fin, siempre les gustaba hablar sobre los matrimonios de los más jóvenes.Valeria no tenía energía para lidiar con eso, así que se escapó rápidamente.Pero Elena no la dejó en paz. Cuando salió de la ducha, Elena subió con una taza de leche caliente.—Señorita, por la noche es mejor tomar leche caliente para dormir mejor.Elena puso la leche en la mesita de noche de Valeria.Valeria asintió y justo cuando se preparaba para acostarse, vio que Elena se quedó parada a un lado, dudando.Después de un rato le preguntó a Valeria:—Señorita, lo que dicen en internet sobre que usted tiene un sugar daddy, y que es la amante de alguien, ¿no es cierto, verdad?Valeria apretó los labios, sin saber cómo responder por un momento.Aunque su relación con Damián no era tan vergonzosa como se rumoraba en internet, al menos las identid