Valeria frunció el ceño sin poder evitarlo. Ya había tomado la decisión de separarse de Benjamín, y no quería que su familia se viera más involucrada.—No es nada, solo unos malentendidos.Lourdes soltó una risa sarcástica sin reparo:—Ay, ojalá todas tuviéramos tu calma. Mira que tu esposo anda con otra, y tú tan tranquila. De verdad, qué temple.—Basta de eso —intervino Rodrigo con firmeza—. Vamos al estudio.Le lanzó una mirada a Valeria, y esta vez Lourdes no volvió a detenerla.Justo cuando Valeria se disponía a subir las escaleras, tropezó inesperadamente. Tenía la mente tan ocupada pensando en cómo explicarle todo a su padre, que no vio lo que tenía enfrente.Cayó de frente y su frente golpeó con fuerza el borde del primer escalón. Sintió un dolor agudo, y al llevar la mano a la frente, notó un calor húmedo. Al mirarla, vio sangre en su palma.Bianca soltó una exclamación fingida, cubriéndose la boca:—¡Ay, lo siento muchísimo, Valeria! Te tropecé sin querer… Pero, ¿cómo es que
Baca selengkapnya