Renacido desde las cenizas, no te quiero a ti
Mi marido mafioso, Alessio, se acostaba con su hermanastra, Sophia.
En el coche, en el estudio, en el baño, incluso en la mesa del comedor, dejaron pruebas de su aventura por todas partes.
—Sophia, no te preocupes. Una vez que consolide mi posición en la familia, te lo daré todo.
—Blair... solo es una herramienta para asegurar mi posición.
En nuestros ocho años de matrimonio, él me había susurrado las palabras más dulces del mundo.
Ahora, su devoción no valía nada.
No lloré ni armé un escándalo. En cambio, hice un trato en el mercado negro. En dos semanas, Blair Greco desaparecería de este mundo para siempre.