All Chapters of Quédate Con Tu Luna Podrida: Chapter 1 - Chapter 10

Después de tantos años al lado del Alfa Kade, pensé que la ceremonia de unión que tanto había anhelado por fin se haría realidad.Pero cuando el enlace mental de Chloe irrumpió en mis barreras mentales, descubrí que no era más que un reemplazo.—¡La manada no habla de otra cosa! No puedo creer que mi hermano, siendo tan insensible, encontró a su compañera destinada y ni siquiera le dijo a nadie.La mano con la que sostenía mi daga de plata tembló. El problema era que ella estaba hablando de mí. Su hermano, Kade, el Alfa de la manada Luna Negra, y yo habíamos sido compañeros en secreto durante cuatro años.Al principio, nunca le conté a Chloe sobre nuestra relación secreta. En parte por nuestra amistad, y también porque Kade y yo nos habíamos marcado en secreto después de que él alcanzó la mayoría de edad y se convirtió en el Alfa.Nunca imaginé que, en cuanto asegurara su posición, reclamaría públicamente a otra loba. El pensamiento me arrancó una sonrisa amarga.—¿Él te lo contó?—Cla

—Dile a tu Alfa que acepto la invitación.Vi un destello de sorpresa en los ojos del mensajero, y una extraña sensación de satisfacción creció dentro de mí.—¿Cuándo podrías empezar?—En una semana.En cuanto se fue el mensajero, guardé la invitación, con la mente ya puesta en el futuro. Ya que Kade solo me veía como una sustituta, no tenía caso desperdiciar mi juventud en esa farsa de relación. La manada Silver Crest era más fuerte que la manada Luna Negra, y el puesto de jefa guerrera me ofrecía un futuro mucho mejor que mi situación actual. Empaqué una maleta pequeña y manejé hacia los cuarteles de los veteranos, en los límites del territorio de la manada.—¿Anya?Mi padre abrió la puerta, gratamente sorprendido.—¿Qué haces aquí a estas horas?Su cara estaba aún más pálida que la última vez que lo vi, y la tos ronca, producto de sus viejas heridas de guerra, era peor.—Tengo buenas noticias.Le dije mientras lo tomaba del brazo, que le temblaba un poco.—La manada Silver Crest me

Desprevenido, Kade retrocedió por el empujón. Su expresión se volvió seria y un destello peligroso brilló en sus ojos dorados de lobo.—¿Por qué? ¿Es por el Alfa de la manada Silver Crest? ¿O porque no fui a cenar con tu papá? Ya no eres una niña. Deja de hacer berrinches.Me arreglé la camisa y me la abotoné, dije con voz firme:—¿Cuándo te he hecho un berrinche?Mi firmeza agotó la poca paciencia que Kade tenía.Me lanzó una mirada dura, molesta, mientras la presión de su autoridad de Alfa emanaba de él.—Te estoy dando una salida, Anya. Te sugiero que la tomes.Lo miré en silencio, con una actitud vacía.—Vamos a terminar nuestra relación.—¿Terminar nuestra relación?Kade repitió mis palabras con un tono lento y despreocupado. Sonrió de manera indiferente.—¿Y qué relación creías exactamente que teníamos?Me quedé helada.—¿A qué te refieres?Kade se rio de manera burlona, con una mirada cruel.—Eres una distracción. Algo temporal. Nada más. Si ya te cansaste de este juego, te pued

Mientras estuve en recuperación, no dejé de preparar mi traslado a la manada Silver Crest.Lo único que quería era terminar la transición de mis responsabilidades y largarme de ese lugar lleno de malos recuerdos.En esos días, Kade fue a verme una vez. Llevaba ropa negra informal y traía un ramo de flores.—¿Qué haces aquí?Lo miré con indiferencia.—Vine a ver cómo seguías.Se acercó a la cama y bajó la mirada hacia mi brazo vendado.—¿Listo? Entonces vete.—Sobre lo de anoche…Hizo una pausa y volvió a mirar mi brazo vendado.—No debiste haber ido al festival.Por un momento no lo entendí y luego me reí con sarcasmo.—¿O sea que fue mi culpa?—No quise decir eso.Kade arrugó la frente.—Sabes que Selena no está acostumbrada a la vida de la manada. Deberías ser más comprensiva.—¿Comprensiva?No podía creer lo que oía.—La que terminó quemada fui yo, ¿y quieres que sea comprensiva con la que me lo hizo?—¡No lo hizo a propósito! —dijo él, alzando la voz—. ¿Por qué siempre tienes que c

Tras dudarlo unos segundos, acepté el enlace forzado.—¿Estás bien?Al escuchar su voz, casi me reí.—¿Y eso? ¿Ahora el Alfa intenta ser amable? Ya te dije, no voy a retirar la denuncia.Por una vez, Kade no discutió. Su tono era inusualmente sincero.—Lo siento.Su actitud me desconcertó. Nunca lo había visto comportarse así, casi humilde.—Si en serio lo sientes, entonces aclara las cosas. Los rumores que están por toda la manada… eres el Alfa, es imposible que no sepas de qué hablo.Hubo un silencio de unos segundos, y luego su voz grave se escuchó.—El daño ya está hecho. Una aclaración no va a cambiar lo que la gente vio. Solo va a meter a Selena en este lío también. En lugar de empeorar todo, es mejor contener los daños…Lo interrumpí.—O sea que lo que dices es que no importa que hayan violado mi privacidad, que mi dignidad esté por los suelos, con tal de que a tu adorada Selena no le pase nada.—Esto es por el bien de la manada. Como guerrera, deberías tener una visión más ampl