Lee Su Ho

Amar a Gabriel Morales era un secreto inconfesable. Porque Gabriel no era cualquier hombre: era el tío de Camila Flores. Ella era la rosa que él había cultivado con ternura… y él era el amor que ella no podía nombrar en voz alta.

Una semana antes de nuestra Ceremonia de Marcaje, en la fiesta de un amigo de Ethan Stormwind, le dije que quería romper con él. Al escucharme, todos se rieron, pues sabían que durante los últimos seis años, mi objetivo en la vida había sido convertirme en su Luna. ¿Por qué querría romper con él si solo faltaba una semana para la ceremonia? Incluso Ethan pensó que estaba siendo irrazonable, y me cuestionó: —¿Solo porque el día de nuestra ceremonia tengo que llevar a Selene al curandero para que le hagan una revisión, estás haciendo un berrinche y quieres romper conmigo? Después de una breve pausa añadió: —Los dos somos adultos, ¿puedes comportarte de manera más madura? Podrías reprogramar la ceremonia. ¿Por qué insistes en ese día en particular? No tengo tiempo para tus escenas de celos. Asentí en silencio. Sí, algo tenía que cambiar, pero no era la fecha de la ceremonia, sino él. Yo iba a aceptar ser marcada por alguien más.

Tuvimos una relación de diez años. Salvador Ríos, finalmente, aceptó casarse conmigo. Pero el día en que debíamos tomarnos las fotos para la boda, cuando el fotógrafo nos pidió que nos besáramos, Salvador frunció el ceño con desagrado, murmuró que sufría de misofobia y, sin más, me empujó suavemente a un lado y se marchó solo. Yo, con la cara ardiendo de vergüenza, me vi obligada a disculparme con todo el equipo por su actitud. Afuera caía una nevada densa. Era imposible encontrar un taxi. Caminé sola, paso a paso sobre la nieve, con los pies empapados… y el corazón también. Y al llegar al departamento que sería nuestro hogar conyugal, lo encontré besando a Lucía Solís. Abrazándola como si el mundo estuviera a punto de acabarse. —Lucía… solo dime una palabra… y dejo esta boda y todo ahora mismo —susurró él. Diez años de amor ciego… de pronto se convirtieron en una broma cruel. Lloré como nunca. Y luego decidí que sería yo quien escapara primero de esa boda. Tiempo después, se corrió la voz en todo nuestro círculo social: El joven Ríos buscaba desesperadamente a su ex prometida por todo el mundo, solo para rogarle que lo mirara una vez más.

Mi novio fue diagnosticado con cáncer y necesitaba un trasplante de hígado. Cuando supe que yo era compatible, no dudé ni un segundo en aceptar la operación. Me extirparon dos tercios del hígado. El dolor era insoportable, pero en cuanto recuperé la conciencia, corrí a ver cómo estaba él. Frente a la puerta, escuché su conversación con un amigo. —Eres un genio, Javier. Nadie más podría idear una forma de venganza tan cabrona. Javier Morales soltó una risa burlona. —Si no fuera porque no quería armar tanto escándalo, hasta le habría quitado un riñón solo por diversión. —Por su culpa, Elena fracasó en el examen de ingreso a la universidad y tuvo que irse al extranjero. En un mes regresará, y en ese momento me despediré de Lucía para siempre.

Al renacer en esta segunda vida, tomé una decisión: mantendría la máxima distancia posible de Santiago Fernández. Cuando lo vi llegar como director a mi empresa, renuncié esa misma tarde. Cuando compró un apartamento en mi edificio, me mudé al otro extremo de la ciudad. Y cuando anunció que dirigiría el imperio familiar desde aquí, solicité mi traslado internacional. En mi vida anterior, lo había obligado a casarse conmigo usando mi embarazo como chantaje. Pero justo el día de la boda, su primer amor regresó. Al vernos juntos en el altar, corrió hacia la terraza y saltó al vacío. Santiago fingió que nada había pasado y se casó conmigo, sonriendo. El día de nuestro aniversario de bodas, nos llevó a mi hija y a mí a hacer puénting. Pero él cortó las cuerdas, y mi hija y yo caímos, muriendo destrozadas. Después de nuestra muerte, se inclinó sobre nuestros cuerpos y rio con crueldad: —¡Si no fuera por ti, Valentina no se habría suicidado! ¡Ahora ve y págale por tu culpa! Cuando volví a abrir los ojos, había regresado a esa noche en que usé mi embarazo para obligarlo a casarse.

Celeste is a young peasant girl who is pursued by a god who wants to make her his wife against her will.

Kenzo Darka, seorang mahasiswa sekaligus penyanyi kafe jatuh hati pada Aleea Verina, teman sekampusnya. Hubungan mereka ditentang ayahnya Aleea karena perbedaan strata sosial di antara keduanya. Kenzo yang bersikeras mencintai Aleea akhirnya diberikan tantangan oleh Ayah Aleea agar menjadi penyanyi sukses sebelum bisa melanjutkan hubungan dengan Aleea. Mampukah Kenzo menuntaskan tantangan dan berhasil menjadi penyanyi sukses?

"Mama, aku tak mau menikah dengan Igo. I hate him!" Ciara menghentak-hentakkan kakinya memprotes perjodohan yang telah divoniskan atas dirinya dan Rodrigo. Semenjak masih SMP, mereka sudah jadi musuh bebuyutan seperti Tom and Jery. Rodrigo alias Igo, sama halnya dengan Cia. Pemuda itu mengamuk karena tahu orang tuanya menjodohkan dia dengan gadis pecicilan yang selalu menentangnya di sekolah. "Ma, yang bener aja? Tuh cewek nggak tipeku banget, bisa-bisa Igo masuk RSJ kalo dia jadi biniku!" Lantas bagaimana jika mereka HARUS SEKAMAR DAN SERANJANG untuk selamanya? Ditambah lagi Igo dan Cia berusaha merahasiakan status mereka yang notabene laki-bini dari teman secircle pergaulan mereka demi menjaga muka masing-masing. Akankah yang benci itu tidak berubah menjadi bucin? Yuk baca kisah cinta muda-mudi masa kini ini hanya di karya terbaru Agneslovely2014, Sleep With My Enemy. Happy reading!

Diana was murdered on the day of her Engagement anniversary by her fiance Gaston and her best friend Rebecca. They laughed as her car caught up in flames and she almost died. Luckily for her, she ended up in the hospital where she had plastic surgery, after fully recovering, she realized that Gaston and Rebecca had gotten married and were living her life. She swore to ruin their lives, exacting her revenge by working as a secretary for her Ex-fiancée Gaston, making him fall helplessly in love with her. But things take an unexpected turn when she has a one night-stand with a childhood crush who chases her to the ends of the earth to make her his.

My husband, Martin, was the head of a powerful mafia don. When his widowed sister-in-law, Tricia, got into a car accident, I was forced to give her a blood transfusion. I told them through tears that I was newly pregnant and too weak to donate, but they accused me of faking the medical report. “You were out running just last week. Now you’re claiming you’re pregnant when you’re asked to donate some blood? You just don’t want to help Tricia!” In the end, they drew my blood by force. The strain caused me to miscarry, and while I bled out, my husband stayed by Tricia’s side. After that, I didn’t beg him to return. I dragged my broken body away, left the divorce papers behind, and left him for good. However, when the truth finally came to light, Martin lost his mind with regret.